El piso es muy amplio, está equipado con todo lo necesario e impecablemente limpio. Está en un sitio precioso, junto al lago de Mosigo, en una zona tranquila de San Vito, a cuyo centro se puede ir andando. La casa tiene jardín y 3 terrazas con vistas preciosas a la montaña, así como un parque infantil cerca. La propietaria vive debajo y es muy amable y discreta.
Nuestra estancia fue muy agradable y volveríamos encantados.