El propietario bien, aunque tarda un poco en contestar a las preguntas una vez has pagado. Todo lo que nos faltaba nos lo han facilitado. Cuna, Kettle, hasta aspiradora porque nos gusta tener la casa limpia. Barbacoa genial, piscina bien, pero se cae a pedazos, por lo que mi hermano y mi hermana se cortaron los pies el primer día. Vinieron a verlo pero eso seguí cayéndose a cachos... un poco peligroso. Lo peor aunque ya sabíamos, es que no hay aire acondicionado en las habitaciones, solo en el salón, por lo que la vida intentamos hacerla solo en el salón, a la hora de dormir, algunas noches pasando muchísimo calor, ni con los ventiladores de techo y de pie que nos prestaron se podía dormir. Si abres ventanas te acribillan los mosquitos, aun teniendo 2 antimosquitos enchufados. Cerca de la playa a 1 minuto andando, playa Veneziola (muchas medusas, pero sin olas, para los niños ok), y Pudrimel a 8 minutos andando, con olas y sin medusas. Algún supermercado cerca, Supercor a 8 minutos en coche.