Todo empezó muy bien, la estancia adecuada y el trato bastante bueno. El problema apareció unos días después de volver a casa cuando nos llego un recibo de por desperfectos. Al devolver las llaves nos devolvió la finanza y no entendíamos nada porque no habíamos roto nada y habíamos dejado el apartamento en buen estado. Cuando reclame a Frank, me dijo que habíamos dejado el apartamento muy sucio y como había tenido que pagar a la señora de la limpieza más horas nos lo había cobrado, alegando que elementos como la barbacoa (que no utilizamos) estaban muy sucias. Tener en cuenta esto ya que utilizo la cuenta con la que pagamos la estancia para cobrarnos este recibo sin nuestro permiso.